“Vivir la vida”
Autorizada su publicación NN.
Carta de una alumna a sus compañeros: el valor de la vida
"Vivir! se convierte muchas veces en actos de inercia en donde dormir, despertar, comer, caminar y mirar…no poseen mayor sentido que, el de hacer las cosas por obligación. “Vivir la Vida” es despertar y agradecer porque el día sea soleado, haya lluvia o esté nublad. Entendiendo que cada uno de esos climas es indispensable para el equilibrio en la naturaleza, ya que si hubiera mucho sol las plantas se secarían y la lluvia no cesase habrían grandes inundaciones. Si lo miramos de esa manera, "vivir la vida” es enfrentarse a un día soleado como los buenos momentos y también de lluvia como los malos, comprendiendo que cada uno cumple un rol de crecimiento en nuestras vidas... "Vivir la vida" es comer y dar gracias por ello; por quienes te acompañan en la mesa y con quien tenemos el gusto de compartir. "Vivir la vida" es caminar y visualizar nuestro futuro, recordar frases y conversaciones con gente que amas. "Vivir la vida" es reflexionar, es sentarse y pensar en lo que fuiste, lo que eres y lo que quieres llegar a ser. "Vivir la vida" es mirar y “ver”: Ver el sufrimiento ajeno, ver quienes te necesitan, ver lo grandioso de nuestro mundo, los colores, las texturas, los diseños de la naturaleza. “Vivir la Vida” es AMAR...
Es por ello que hace más de un año, me decidí. Me decidí a hacer lo que amo, amo la belleza, amo los colores, amo las tonalidades... amo lo diferente, amo las maneras de expresarse, amo el Arte y la ciencia. Y ¿Qué mejor que enseñar lo que uno ama?, que manera más hermosa de contribuir, aunque sea con un granito de arena, a entregar felicidad al mundo: ¡Qué mejor que ser maestra de la vida, maestra de colores, de mundos que sobrepasan los horizontes, mundos reales y mundos surrealistas de sueños, mundos fantásticos, mundos maravillosos… No enclasarnos, no etiquetar, no hacernos esclavos antes de mirar, porque quiero ser y enseñar a ver más allá de lo que se logra mirando. "Vivir la vida" es “ver”.
Siempre he dicho: “No le hagas a los demás, lo que no te gusta que te hagan a ti”. Pero muchas veces lo haces sin querer, sin darte cuenta por más que me lo repito una y otra vez...A veces se me olvida… lo importante es darse cuenta de los errores y tratar de remediarlos. Jamás he dejado de decirle “Te Amo” a la gente que amo... Creo que eso está bien.
Recuerdo que antes, escribía mucho… lo he dejado de hacer y no es porque ya no me guste, sino porque las circunstancias de la vida hacen que uno priorice otras cosas. En una película llamada “500 Días con Summer” lo comprendí; fue una frase: “La gente cambia, los sentimientos cambian pero eso no significa que lo que vivimos no fue sincero ni real”.
Muchas veces cuando me sentía sola, decía: “Dónde están mis amigos”; Pero la vida te enseña a que a veces uno debe caminar sola, para aprender y comprender muchas cosas y no es culpa de los amigos no haber estado allí es que simplemente la gente no es adivina y si uno no pide ayuda, esta no te va a llegar sola. No fue su culpa, ni la mía, fueron las circunstancias; una circunstancia que me sirvió para crecer.
Muchas veces cuando me sentía sola, decía: “Dónde están mis amigos”; Pero la vida te enseña a que a veces uno debe caminar sola, para aprender y comprender muchas cosas y no es culpa de los amigos no haber estado allí es que simplemente la gente no es adivina y si uno no pide ayuda, esta no te va a llegar sola. No fue su culpa, ni la mía, fueron las circunstancias; una circunstancia que me sirvió para crecer.
Los recuerdos. Recuerdo a mi abuelo despertándome todas las mañanas, dándome mi mamadera a las 6 am antes de irse a trabajar, todos los días hasta que cumplí 7 años. Recuerdo a mi madre muy joven, ya que sólo nos separan 15 años; pensar que la semana pasada compartimos un trago juntas; recuerdo que al entrar a kínder me costó mucho hacer amigos ya que en la casa que crecí solo había gente grande y no fui al jardín, por ello me recuerdo muy madura; recuerdo los cumpleaños de mi abuelo con grandes fiestas de mariachis y asados, todos reían, siempre había mucha gente, recuerdo que le prometí un viaje a México; recuerdo al niño que me gustaba en 2° Básico, era hermoso hace un tiempo lo vi, esta tan feo jajajaja; recuerdo mi primer beso a los 15 años. Es lindo recordar, como que te infla el pecho y dan ganas de llorar, pero no de pena sino de alegría; recuerdo que siempre quise juntar todos mis escritos y hacer un libro, lo voy a hacer!
Este será el principio:
Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo, y me regalara un trozo de vida, posiblemente no diría todo lo que pienso, pero, en definitiva pensaría todo lo que digo. Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan. Dormiría poco y soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz.
Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen, escucharía mientras los demás hablan, y cómo disfrutaría de un buen helado de chocolate!
Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, dejando al descubierto, no solamente mi cuerpo, sino mi alma. Dios mío, si yo tuviera un corazón.... escribiría mi odio sobre el hielo, y esperaría a que saliera el sol. Pintaría con un sueño de Van Gogh sobre las estrellas un poema de Benedetti, y una canción de Serrat sería la serenata que le ofrecería a la luna.
Regaría con mis lágrimas las rosas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos... Dios mío, si yo tuviera un trozo de vida... no dejaría pasar un solo día sin decirle a la gente que amo, que la amo.
Convencería a cada ser humano de que es mi favorito y viviría enamorado del amor.
A los hombres les probaría cuan equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse.
Convencería a cada ser humano de que es mi favorito y viviría enamorado del amor.
A los hombres les probaría cuan equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse.
A un niño le daría alas, pero dejaría que él solo aprendiese a volar.
A los viejos, a mis viejos, les enseñaría que la muerte no llega con la vejez sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes los hombres.....
Tantas cosas he aprendido de ustedes los hombres.....
He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada.
He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño por vez primera el dedo de su padre, lo tiene atrapado para siempre.
He aprendido que un hombre únicamente tiene derecho de mirar a otro hombre hacia abajo, cuando ha de ayudarlo a levantarse.
Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero finalmente de mucho no habrán de servir porque cuando me guarden dentro de esta maleta, infelizmente me estaré muriendo.